Capsula de mierda.

Han hecho una bandeja para la arena del gato nueva, de alta tecnología, es de tecnología tan sofisticada que ni si quiera utiliza arena, ha dejado obsoleta a la arena como material aislante. Ni arena ni nada, es una bandeja vacía, no tiene líquidos raros, ni ventiladores ni absolutamente nada más que el espacio libre para que el gato cague. Pero funciona mejor que ninguna otra.

Está llena de arañas, la bandeja es un nido de arañas que viven en los recovecos de las paredes con la tapa. Arañas diminutas pero muy trabajadoras. Cuando el gato caga  las arañas salen muy rápido de su agujer, agarran el trozo de mierda con sus patas de bicho y la envuelven muy rápido con su telaraña. No las importa tocar la mierda con las patas, no tienen escrúpulos, la hacen girar como un pelota mientras la cubren de telaraña. Cuando acaban no queda mierda de gato, solo una bola de telaraña, mierda de gato encapsulada.

Adiestrar a las arañas ha sido un logro enorme, fruto de la colaboración entre entomólogos e ingenieros industriales. Los primeros nunca se hubieran planteado enseñar a las arañas a realizar un trabajo, los segundos nunca vieron a las arañas como solución al problema de las heces felinas. Es cierto que resulta una aplicación frívola, de hecho es un producto caro; carísimo, cada bandeja cuesta miles de euros, solo las verás en casa de ricachones como la reina de Inglaterra. Una bandeja llena de arañas en el baño de la reina de Inglaterra, mucho oro, mármol y una bandeja tecnológicamente avanzada llena de arañas.

Pero es el primer paso para el uso de arañas en otros productos como tarteras o preservativos. Preservativos de telaraña, un sobrecito con una araña dentro para que te la pongas en la polla y te la forre de telaraña.